Después de estudiar teatro y actuar en el exterior, Sol Schiller se enamoró del aspecto fotográfico del teatro y del cine. No tardó en sentir atracción por las escenas del cotidiano , creadas por gente común y fusionarlas con su encanto por la naturaleza. Estas escenas se tornaron importantes temas en sus fotografías. Después de ver y comprender el poder de las imágenes para retratar realidades ocultas y cambiar vidas, éstas se tornaron su mensaje y su tentativa personal de crear un mundo mas amable, justo y comprensivo.